Es cierto, que tanto el hogar como la institución educativa, son los responsables del crecimiento y de la capacidad del intelecto, realmente, son los responsables regios de la educación de los jóvenes. Los medios de comunicación son poderosos sugerentes, pero es el feedback de los padres y del docente es lo que más incidencia tiene en el desarrollo de su intelecto.
Las expresiones valorativas de las figuras parentales son poderosas en la mente en formación del infante. Existen dos tipos de experiencias extremas que es importante tener en cuenta: Las experiencias cristalizantes y las paralizantes.
1. Las primeras, son hitos en la historia personal, claves para el desarrollo del talento y de las habilidades en las personas.
2. Son aquellas que bloquean el desarrollo de una inteligencia.
La responsabilidad de las figuras parentales es enorme. Hay que tomar conciencia de ello y actuar en beneficio del joven. Los padres en casa, con estímulo, comprensión y aliento. Y los docentes cambiando el enfoque del proceso de enseñanza y de aprendizaje. Aplicando el concepto de las inteligencias múltiples, desarrollando estrategias didácticas que consideren las diferentes posibilidades de adquisición del conocimiento que tiene el individuo.
Un ejemplo sencillo, si el estudiante no comprende a través de la inteligencia que elige el docente para informarlo, debe considerar que existen por lo menos siete diferentes caminos para intentarlo. Además, enriqueciendo los entornos de aula, promoviendo amplitud y posibilidades de interactuar de diversas formas con compañeros y objetos a elección del estudiante. Como también, tendría que desarrollarse un nuevo concepto y sistema de evaluación.
A continuación, nombraremos algunos pasos para dar feedback en el aprendizaje:
1. Leer o escuchar el trabajo: leer o escuchar el trabajo de comienzo a fin sin comentar en los errores. La idea es generar una apreciación global antes de decidir el área prioritaria para entregar feedback.
2. Crear una lista de aspectos a mejorar y elegir un foco: es necesario elegir de los aspectos a mejorar el más apremiante o vinculado con el proceso de enseñanza que está ocurriendo. Es importante ser específico.
3. Escribir el feedback: usar expresiones del tipo ‘Cómo podrías mejorar…’ y recomiende o pida que ‘piensa en un texto similar que hayas leído y que sirva como ejemplo para tu trabajo’, o refiera a contenidos vistos en clases que sería útil revisar.
4. Entrega del feedback: siempre comenzar resaltando algo que el estudiante hizo bien. Esto tiene dos propósitos: el primero es validar el trabajo del estudiante, reconociendo o identificando los aspectos destacables de su trabajo. Esto es esencial, ya que puede que el estudiante no haya reconocido ese aspecto valioso y lo haya logrado sin proponérselo. Lo segundo, es que al recibir un feedback positivo, estará emocionalmente mejor preparado para recibir una sugerencia de cambio.
En síntesis, es evidentemente que es un trabajo en equipo. Los principales responsables del crecimiento del intelecto, serán los docentes que decidan hacer o intervenir en este proceso. En él participan los docentes, desde sus diferentes roles, lo estudiantes y padres. Una de las consecuencias más alentadoras y fácilmente observable es el alto nivel de motivación y alegría que se produce en los educandos. A esto hay que agregar la aparición del humor en las asignaciones. Esto último transforma realmente el preconcepto del tener que ir a la institución educativa y el asistir al colegio se transforma así en algo grato, divertido y útil.