Esta corriente surge bajo la influencia de enfoques epistemológicos imperecederos, ante la pregunta: ¿Cómo aprende el hombre? El constructivismo se establece como una línea que ha venido a satisfacer y a crecer en el campo educativo y pedagógico, en relación directa con el desarrollo del conocimiento y del aprendizaje, lo que motiva una perspectiva distinta de la enseñanza.
En el campo de la Pedagogía y la didáctica, no es un cuerpo dogmático que admita una sola y única interpretación; lo importante es que lo permanece en que su discurso y asume elementos claves de la selección racional. Las principales corrientes constructivista son promovidas por Piaget, Vygotsky, Novak, Bachelard, Driver, Postner, Gertzog, Watss, Porlán, Kelly, Ausubel, Gallego-Badillo y otros investigadores en el mundo. Se considera que las ideas de Piaget y Vygotsky como referencias básicas en la estructuración de un pensamiento constructivista en el ámbito educativo.
El constructivismo habla que el conocimiento acontece como un proceso de construcción interior, permanente, dinámico a partir de las ideas previas del estudiante, constituidos por sus experiencias o creencias, que, en función del contraste, comprensión de un nuevo saber o información mediado por el docente, va transformando sus esquemas hacia estados más elaborados de conocimiento, lo cuales adquieren sentido en su propia construcción “aprendizaje significativo”. Este proceso depende de la interacción cognitiva que logra el sujeto con la realidad en donde actúa, potenciado por los procesos mentales básicos o superiores de que goza como ser inteligente.
De acuerdo con Pérez Miranda, Gallego-Badillo, El constructivismo diseña que los seres humanos, en comunidad, construyen sus conocimientos sobre el mundo, los cuales evolucionan y cambian; así mismo, que todas estas elaboraciones, en el transcurso de la historia, han servido para regular las relaciones del ser humano consigo mismo, con la naturaleza y con la sociedad.
El constructivismo pedagógico, según Flórez, asienta sus bases en el aprendizaje como una construcción interior, individual e intersubjetiva; por ende, el educador debe orientar la enseñanza hacia el logro del entramado que se forma de los conceptos propuestos con los conceptos previos de los alumnos, abordando sistemáticamente la transformación y desarrollo intelectual del sujeto humano. De manera sintética se indican, en la siguiente matriz, algunos de los enfoques o perspectivas más representativos del constructivismo, elaborados desde diferentes campos de acción humana.
Es importante reconocer que el paradigma ecológico, las pedagogías críticas y el constructivismo representan tres Corrientes Pedagógicas Contemporáneas definidas en torno lo complejo, plural, dinámico, transformativo, dialógico, constructivo, crítico y ecológico de los procesos formativos que se requieren en la actualidad. Y que favorecen tres aspectos importantes como exigencias de la sociedad: formación de valores, autonomía consciente-crítica-dialógica, y actitudes y habilidades ecológicas de participación social.