El aprendizaje modular es una estrategia que descompone el currículo en módulos independientes, cada uno con objetivos específicos y configuración de calidad propia. Fink (2013) cita que, mediante su organización en competencias, el modelo modular permite una mejor planificación y agenda formativa para el estudiante.
Por otro lado, también fomenta su autonomía y autocontrol en el proceso de adquisición de conocimientos, ya que puede acceder al siguiente módulo tras demostrar su adquisición. Los módulos bien diseñados presentan secuencia de teoría y práctica, con conceptos y competencias aplicados inmediatamente, lo que lleva a un aprendizaje efectivo y transferible al entorno real.
Según Salas-Pilco (2020) el aprendizaje modular se ajusta de manera similar a los caminos de estudio de enfoque flexible o al estudiante, admitida por la interacción asincrónica. Sin embargo, uno de los desafíos del aprendizaje modular es la creencia conocida. En caso de que no funcione haya una niebla de módulos, no tiene sentido el eso para el estudiante. Por lo tanto, es esencial planificarse en función del marco principal común. Como ejemplo, las cualificaciones modulares (EQF) son un elemento clave de las nuevas políticas de educación y formación europeas (CEDEFOP, 2017). Otro ámbito de aplicación del aprendizaje modular es la formación profesional ya que se trata de la enseñanza que se ofrece a lo largo del trabajo.
Según Garrison & Vaughan (2008) estos módulos para funcionar como una comunidad de aprendizaje. Por lo tanto, el cambio al aprendizaje modular requiere una evaluación con pautas de competencia. Biggs & Tang (2011) sugieren la heurística de alineamiento constructivo para evaluar la calidad de un enfoque basado en módulos en relación con el alumnado.
En síntesis, el aprendizaje modular puede ser un método real para abordar los problemas actuales. Asimismo, es una vía efectiva para adaptar la educación a las necesidades cambiantes de los estudiantes y del mercado laboral, promoviendo una enseñanza más flexible, pertinente y centrada en el logro de aprendizajes duraderos.
Referencias
Biggs, J., & Tang, C. (2011). Teaching for quality learning at university. McGraw-Hill
CEDEFOP. (2017). Defining, writing and applying learning outcomes: A European handbook. Publications Office of the European Union.
Fink, L. D. (2013). Creating significant learning experiences. Jossey-Bass.
Garrison, D. R., & Vaughan, N. D. (2008). Blended learning in higher education: Framework, principles, and guidelines. Jossey-Bass.
Salas-Pilco, S. (2020). Diseño de módulos instruccionales para el aprendizaje en línea. Revista de Educación a Distancia.