Antes de que la teoría crítica se desarrollara como un campo teórico importante, la teoría crítica del pensamiento como forma de ver la realidad se ejerció entre los intelectuales de diferentes generaciones. La relevancia y los actos del pensamiento crítico fueron temas de discusión entre los filósofos griegos, entre el renacimiento eruditos y entre los intelectuales de los siglos XIX y XX.
La pedagogía crítica no heredó la Escuela de Frankfurt tal como es. De acuerdo con Kincheloe “la pedagogía crítica amalgamó la liberación de la ética teológica y la teoría crítica de la Escuela de Frankfurt en Alemania con los impulsos progresistas en la educación…” (2007, p.12). Muchas pedagogías críticas está relacionada con la compasión, comprensión mutua y objetivos comunes (Darder, 2003, Zembylas, 2013). Freire (1998) destaca la importancia de la “justa, seria, humilde y generosa relaciones” para el buen funcionamiento de la práctica educativa.
Por ello, el docente crítico entiende su responsabilidad de preparar al estudiante más allá de la profesión que va a ejercer. El educador dota a sus educandos de capacidades para transformar su sociedad, los prepara más bien como agentes de cambio (Fischman & McLaren, 2005). Asimismo, el docente aprovecha la oportunidad de aprender mientras enseña y en palabras de Freire, “la comprensión crítica conduce a la acción crítica” (Freire, 1974). La pedagogía crítica podría ejercerse en diferentes niveles educativos. Por lo que, incorporar la tecnología con una visión crítica pedagógica va más allá de un aula de clase, de una aplicación o carrera profesional ya que para incorporarla se necesita una síntesis de programas, procedimientos (pasos) y herramientas que son orientado a la concreción del proceso educativo en la transición de una forma racional a la implementación de este proceso.
Por otro lado, el uso de la tecnología en la educación cada día está en crecimiento y avance. Lo cual, impulsa a los docentes definir claramente los objetivos de la tecnología educativa. Este paso no es fácil por el hecho de que se expande día a día y está involucrado en diversas esferas de la vida y el trabajo. A continuación, listaremos algunas pautas para la incorporación de la tecnología desde una visión crítica pedagógica de acuerdo con Murati (2013):
- La tecnología educativa abre una perspectiva y uso en la enseñanza.
- La tecnología de enseñanza se conoce como la implementación de modelos de aprendizaje.
- Trata los métodos de enseñanza y el conocimiento científico en el proceso educativo.
- La tecnología de aprendizaje actúa como factor y elemento de cambio en la didáctica de la enseñanza (p. 24).
En síntesis, en el proceso global de la enseñanza de la tecnología educativa, se pretende cumplir los dos objetivos básicos que son: el aspecto intensivo del aprendizaje, el trabajo educativo; y el aspecto extensivo de la organización del trabajo educativo: Por ende, el docente debe tener presente que las tecnologías educativas están determinadas por varios factores, tales como: modos, herramientas, factores de aprendizaje, comunicación en el proceso de enseñanza y programas educativos diseñados para la tecnología moderna.