La complejidad de la gestión educativa como concepto se evidencia por la inclusión de los componentes anexos como: la ética, cultura y diversidad dentro de los diferentes sistemas educativos. La intención de la gestión educativa es fundar y conservar los entornos de la institución educativa que originen, afirmen y conserven la enseñanza-aprendizaje efectiva.
La gestión educativa, mientras cumpla con el cambio planificado, debe responder al cambio disruptivo no planificado creado por cambios repentinos en las estructuras sociales y culturas, así como los avances en las tecnologías. Es aquí, donde cobra especial importancia el componente del liderazgo educativo que dirige y orienta todo el proceso de gestión y administración educativa. El liderazgo incluye tanto la ética profesional de los gerentes como de los docentes y se formula dentro de una multiplicidad de teorías éticas que responden a los imperativos culturales en diferentes sociedades.
La gestión educativa debe responder a los cambios tanto globales como locales debido a los desarrollos tecnológicos que impactan directamente en la enseñanza-aprendizaje a través de cambios en el currículo en términos de prácticas pedagógicas y de evaluación. Es en la manera, en que la gestión educativa como disciplina evolucione para satisfacer de manera efectiva las insuficiencias de los sistemas educativos en función de los desafíos derivados de los cambios tecnológicos, sociales, culturales y económicos, lo que determinará la efectividad y eficacia de las prácticas de gestión en el futuro.
Por ello, mejorar las prácticas de gestión educativa en la educación digital permitirá gestionar el cambio de manera eficaz e innovadora es el principal desafío al que se enfrenta la gestión educativa a nivel local, regional y mundial en las próximas décadas. El liderazgo tiene un rol vital que se desempeña en la creación de las condiciones para el éxito en todos los niveles de los sistemas de educación y formación. Los líderes escolares son actores importantes en la creación de vínculos efectivos entre los diferentes niveles: en la educación, familias, mundo laboral y comunidad local, con el objetivo de mejorar el rendimiento de los estudiantes.
La Gestión Educativa es el proceso de planificar, organizar y dirigir las actividades de una institución educativa, utilizando eficazmente los recursos humanos y materiales, para lograr los objetivos de la educación. Por lo tanto, todas las partes involucradas deben obtener información sobre la gestión educativa, ya que es vital para apoyar el éxito y logro de los objetivos de manera efectiva, como la mejora de las competencias básicas de la gestión como son: las habilidades técnicas, conceptual, interpersonales, de comunicación, toma de decisión, diagnósticas y analíticas.
En síntesis, los profesionales de la gestión educativa también se pueden encontrar trabajando en agencias gubernamentales, empresas privadas y organizaciones. Son aquellos que trabajan en políticas educativas, realizan investigaciones o consultan para ayudar a evaluar y desarrollar maneras de enriquecer y mejorar el sistema educativo en todos los niveles.