Las instituciones educativas sostenibles se adaptan mejor a las necesidades de los estudiantes con discapacidades. De acuerdo con Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) “la educación inclusiva es un sistema que permite que los estudiantes con discapacidades sean educados en las escuelas del vecindario en un salón de clases regular apropiado para su edad con compañeros sin discapacidades” (1997, p.55). La educación sostenible beneficia al estudiante en tres áreas separadas: habilidades académicas, sociales y psicológicas. La razón principal de esto es que los estudiantes aprenden unos de otros, lo que no pueden aprender de los adultos en su vida diaria (Galis, Linscott & Tanner, 1996).
El enfoque de un equipo colaborativo en el aula de clases es un entorno de apoyo que involucra a los profesionales en las decisiones diarias del estudiante de educación especial. Este enfoque ha surgido como un modelo para abordar las necesidades curriculares de todos los estudiantes, tanto discapacitados como no discapacitados, en el mismo salón de clases. “La colaboración es un estilo interpersonal que utilizan los profesionales en sus interacciones con colegas, padres y otros» (Friend, 1992 p14).
A continuación, se presenta la Tabla 1, donde se plasman algunas estrategias colaborativas de inclusión sostenible, que las instituciones educativas pueden utilizar como guía en las aulas de clases:
Tabla 1
Estrategias colaborativas de inclusión sostenible
COMUNICACIÓN EFICAZ |
TRABAJAR CON ALUMNOS |
TRABAJAR CON LOS PADRES |
TRABAJAR CON SOCIOS |
COLABORAR PARA LA INCLUSIÓN |
El rol y opiniones de los padres, cuidadores son muy importantes. |
El trabajo y contribución apoya a las mejoras de la institución. |
La comunicación eficaz, respeto y trabajo en equipo son requisitos clave. |
El aprendizaje personalizado garantiza una práctica eficaz para satisfacer las necesidades de los estudiantes. |
Se debe asegurar que todos los estudiantes experimenten una educación inclusiva de alta calidad. |
Este es un enfoque centrado en el estudiante. |
El trabajo de participación y compromiso es un mecanismo importante para garantizar la escucha y reflexión de las necesidades. |
La identificación, planificación y seguimiento son importantes para mantener relaciones positivas. |
Satisfacer las necesidades es el corazón de lo que hace que una escuela sea excelente. |
Los sistemas educativos deben desarrollar nuevas funciones y servicios en apoyo a las prácticas inclusivas. |
Los padres, cuidadores u otra persona involucrada con la familia debe comunicar sus preocupaciones. |
En todo el trabajo de participación y compromiso, los jóvenes deben ser escuchados activamente. |
Todos los padres deben sentirse incluidos. |
Se debe contar con una variedad de socios como el tercer sector, para ofrecer vías de enseñanza-aprendizaje. |
Las comunidades pueden colaborar para mejorar la inclusión asumiendo un rol innovador como centro de recursos. |
La participación de profesional varía según las necesidades del estudiante. |
Las opiniones de los estudiantes deben ser respetadas y tomadas en consideración. |
Un mensaje corto y regular a los padres sobre el progreso, puede ser efectivo el aprendizaje del estudiante. |
Trabajar con el personal para eliminar las barreras al aprendizaje y garantizar que todos los estudiantes tengan éxito más allá del aula de clases. |
Promover la participación de los estudiantes creando y manteniendo un entorno de aprendizaje seguro y de apoyo. |
Nota. Algunas de las estrategias para la inclusión sostenibles pueden ser desarrolladas tanto por la institución educativa como por el docente y esto dependerá del nivel confianza de este, elaborado por Mujica-Sequera (2021).
Por lo tanto, la característica central de la colaboración sostenible son las interacciones. Las interacciones se llevan a cabo con los profesionales que están comprometidos a ayudar al docente. Este servicio indirecto puede apoyar al docente de una sala de recursos, asistencia, orientación, administración de recursos, entre otros. Dependiendo del modelo colaborativo que se elija, actividades y número total de personas involucradas.
No es sorprendente que los docentes estén nerviosos por educar con tecnología o a estudiantes con discapacidades ya que sienten que no están completamente capacitados para esta labor. Por ello, los lideres educativos deben abordar este problema y decidir qué pasos están dispuestos a tomar para apoyar a su planta docente. Una manera de reducir esta preocupación es que organicen seminarios especiales. Tal como lo señala la OCDE (1997), “los docentes deberán tener experiencia directa con la inclusión para que sus temores cambien. Una vez que esto ocurre y el maestro realmente experimenta el éxito de la inclusión y las actitudes comenzarán a cambiar” (p.58).
En síntesis, en cualquier modelo de enseñanza se debe trabajar por la adaptación de los materiales y esto depende de los resultados adquiridos en la evaluación de los tipos de aprendizaje. Trabajar en conjunto por la presentación, seguimiento y discurso ahorra tiempo en la planificación, instrucción, seguimiento y evaluación del estudiante en el aula de clases.