La telepresencia consiste en que, a través de una sencilla conexión entre dos o más sedes, que pueden encontrarse a miles de kilómetros de distancia unas de otras, permitiendo establecer una comunicación bidireccional o multidireccional, directa, fluida y flexible, con niveles de calidad sorprendentes, permite ver y escuchar al interlocutor con una gran calidad de audio y video. Además, no sólo se mantiene una comunicación oral y gestual, sino que al mismo tiempo se pueden compartir la visualización simultánea del interlocutor con una imagen de la pantalla de un ordenador donde realizar presentaciones.