El aprendizaje espaciado o práctica distribuida es la habilidad que posee un estudiante para practicar o recuperar información de manera particular. Este tipo de aprendizaje es más efectivo cuando se extiende a lo largo de la vida, en lugar de repetirlo secuencialmente durante un período corto de tiempo.
A finales de la década de 1890, el autor Ebbinghaus, anunció sobre el “efecto espaciamiento”. Fue la primera persona en describir la curva del olvido, que muestra la rapidez con la que los recuerdos se desvanecen después de aprender. El autor sustenta que aproximadamente el 50% del contenido estudiado se pierde después de un día. Cuando la memoria está codificada y almacenada en el cerebro, se forman conexiones entre neuronas. Los recuerdos están representados por redes de neuronas interconectadas y cuando aprendemos algo nuevo, se forma una nueva red. Este proceso de consolidación biológica de recuerdos requiere recursos y tiempo.
Por lo tanto, podemos reflexionar que tomar descanso mientras se aprende mejora la capacidad para recordar la información. Espaciar las repeticiones puede permitir que la maquinaria cerebral funcione sin interferencia entre los dos eventos. Otra razón por la que el espaciado es eficaz es que, con el tiempo, los recuerdos se deterioran y se vuelven cada vez menos accesibles. Al intentar volver a aprender algo después de un período de tiempo, en realidad se está reconstruyendo la información en sí y los caminos que conducen a ella, para que sea más accesible la próxima vez.
Otra ventaja del aprendizaje espaciado es que el paso del tiempo también cambia el contexto del aprendizaje. Si ha pasado tiempo desde nuestra última práctica, lo más probable es que nos acerquemos a la información de una manera diferente y usemos diferentes señales o disparadores. Al practicar en contextos variados, nos aseguramos de que la información sea mucho más accesible, en diferentes situaciones y con diferentes pistas.
En síntesis, la enseñanza debe esforzarse para ser eficaz. El estudiante debe concentrarse en reconstruir caminos, no solo en revisar la información. Al espaciar las repeticiones, lo hacemos más difícil, pero el proceso de reconstrucción esforzado es lo que hace que la práctica sea beneficiosa, ya que se está construyendo caminos más fuertes hacia la memoria. Para aplicar una práctica espaciada eficaz se debe trabajar fuerte y luego descansar.
