La incógnita de las escrituras antiguas es una de las iniciativas humanas más importantes. A través del conocimiento de la historia de los pueblos, se ha podido hacer una idea precisa del origen de la civilización. Los sistemas de escritura se originaron hace unos cinco mil años, tras la evolución de los bosquejos hacia formas logográficas, en Asia Menor.
Consecutivamente, la escritura fue silábica, hasta Grecia, donde ya se encuentra un verdadero alfabeto. La historia de la escritura evolucionó notablemente cuando se pasó de incorporar una idea mediante símbolos para hacerlo en forma de signos. Pero el gran salto adelante aparece, sobre todo, cuando el hombre descubrió la escritura fonética, es decir, aquélla que representa gráficamente el lenguaje oral. Efectivamente, de acuerdo a lo que se puede observar a través de la historia de la escritura, los sumerios escribían los nombres de sus productos de exportación en etiquetas o carteles de barro adosadas a paquetes; su escritura cuneiforme estaba formada por signos correspondientes a objetos, personas, ideas, entre otros.
La necesidad de escribir los nombres de los remitentes y destinatarios les llevó a avanzar en su sistema de escritura, ingeniando una manera de representar estos nombres propios, ya que hasta entonces sólo disponían de un signo para los términos persona, hombre y mujer. El recurso utilizado fue el de transcribir el conjunto de sonidos verbales que se emitían al pronunciar el nombre propio de una persona. Este ejemplo concreto ilustra claramente la naturaleza social de los diferentes sistemas de escritura que han desembocado en el actual sistema fonético propio de nuestra cultura.
Tras revisiones y comparación de los alfabetos, a la par con las diferentes aportaciones y teorías de los investigadores en este campo, se pueden acopiar algunas conclusiones:
- Se cree que existe un desarrollo en la forma de los signos desde una etapa icónica a una etapa lineal.
- Se sugiere un desarrollo aparente de los signos desde las figuras redondas a las angulares.
- El desarrollo de la escritura ha seguido en líneas generales un proceso de simplificación y estilización de los signos. La figura tiende a quedar reducida a su contorno.
- El empleo de la escritura ha seguido un proceso de automatización. Se ejecutan mecánicamente recursos que, en el comienzo, fueron producto de la inteligencia y del genio.
- En el punto de partida de las escrituras, los signos han ido girando aproximadamente 90° hacia su parte posterior. Este fenómeno que en el período del papiro se explicaría por la dificultad de cruzar las vetas de la hoja vegetal, se mantiene posteriormente por la facilidad que aporta para aglutinar signos en menos espacio, al colocarlos de forma vertical.
- Desde el punto de vista de la Teoría de la Escritura, la evolución va desde una escritura logo-silábica, a través de la silábica, a la escritura alfabética.
- Se aprecia un cierto paralelismo entre el desarrollo de la escritura en el infante y el proceso seguido por las distintas civilizaciones, en la adquisición de la misma, sugiriendo la ley de recapitulación de Haeckel.