Actualmente, el mundo globalizado y apoyado por la tecnología requiere que las instituciones educativas ejerzan nuevas funciones, pedagogías y planteamientos en la formación de los futuros docente.
El mundo actual requiere de profesionales que dominen la tecnología, pero, lograr la integración hombre-maquina depende de que las instituciones capaciten a los docentes, para que puedan fusionar el ambiente de aprendizaje tradicional y la tecnología, lo cual permite fomentar la dinamización de las clases en el plano social, ya que esta combinación estimula la interacción cooperativa, colaborativo y el trabajo en equipo. Por lo tanto, alcanzar esta fusión exige que el docente adquirir un conjunto de competencias para desarrollar una clase. La formación profesional del educador es un componente esencial para la mejora de la educación actual.
El autor Larrosa (2010) considera que las habilidades que debe poseer un docente se plantean en torno al ejercicio profesional, vocación, competencia científica y técnica, actitud de apertura, dedicación, reconocimiento de los deberes y derechos éticos de su profesión con la sociedad. Por consiguiente, todas estas habilidades establecen el éxito de la implementación de cualquier recurso en los procesos de enseñanza-aprendizaje.
A continuación, listaremos las habilidades que debe poseer un docente de acuerdo con la Pontificia Universidad Javeriana (2016):
- Habilidades psicoeducativas: Capacidad para la creación de contextos educativos, reconocimiento de problemáticas disciplinares o del entorno, generación de experiencias que promuevan relaciones concretas con las problemáticas identificadas, la promoción de la reflexión, pensamiento crítico y evaluación integral del aprendizaje.
- Habilidades vocacionales y de liderazgo: Formación de personas, el manejo innovador y creativo de los recursos a los que tenga acceso de las metodologías para la enseñanza y evaluación, así como la habilidad para generar impacto e influencia, escuchar, preguntar, explicar y comunicar de manera efectiva.
- Habilidades colaborativas y cooperativas: Perspectiva y actitud hacia la comunicación con sus pares o colegas en una lógica de apertura a compartir información y conocimiento.
En síntesis, el fortalecimiento de las habilidades docentes debe promoverse a través de la investigación, programas de formación y de la cultura informacional que promueve las instituciones educativas. Es importante que las instituciones promuevan el proceso de enseñanza-aprendizaje basada en investigación para que la práctica pedagógica impulse la creación y desarrollo significativo de la sociedad del conocimiento.