En la educación es frecuente encontrar casos de estudiantes sin déficits atencionales ni problemas perceptivos, y es frecuente oír la queja de padres y de docentes sobre el escaso interés con que éstos se enfrentan a las actividades escolares plasmado en el famoso » no tiene interés», dando a entender que se trata de un problema motivacional.
Resultaría ingenuo pensar en un modelo así cuando lo más común es la polideterminación de las conductas. De acuerdo con Schiffman y Kanuk, quienes dejan claro que la diversidad de variables que están en la base de tal comportamiento como consumidores: variables de personalidad, sociales, culturales, motivacionales, etc. Las personas piensan que, la motivación sí es uno de los más importantes a la hora de explicar el consumo.
Estos autores, les proponen a los docentes:
- Conocer primeramente los antecedentes académicos y conductuales del grupo.
- Conocer el reglamento interno del plantel y el reglamento de evaluación.
- Demonstrar el programa de trabajo, cronograma de actividades de la asignatura, formas de evaluación.
- Dinámicas de presentación, permiten conocer breves antecedentes biográficos de los estudiantes.
- Establecer un ambiente de trabajo en el cual las reglas sean claras, la distribución de la tarea equitativa.
- Evadir los tratos preferenciales, privilegiando a los estudiantes sobresalientes.
- Fomentar las relaciones interpersonales a través de actividades grupales.
- Cumplir los compromisos acordados con los estudiantes, como la entrega de calificaciones, revisión de tareas.
- Producir un avance personal real que ellos puedan constatar.
- Al estudiante le agrada ver que se tiene información de sus actividades.
- Estar alerta a los indicadores del grupo respecto al funcionamiento de la clase.
- Vigilar el respeto, la cortesía y evitar confrontaciones entre estudiantes y con el docente.
- Aprovechar la creatividad de los estudiantes hacia las actividades de la clase.
- Detectar los líderes del grupo para guiar sus habilidades a promover el crecimiento de grupo.
- Estimular la participación y tomar en consideración las características individuales de cada uno de los estudiantes.
- Mostrar interés real en las consultas personales o grupales acerca de sus inquietudes, propuestas.