Hoy en día, se puede apreciar que en las aulas de clases la preparación del contenido educativo a partir de conocimientos cognitivos, se hacen imprescindibles para la educación del siglo XXI. De acuerdo, a la organización Deans for Impact cree que, como parte de la preparación de los contenidos, el profesor-candidato debe lidiar con, y ser capaz de responder, las preguntas en la ciencia del aprendizaje. Ciencias relacionadas con la forma en que los estudiantes aprenden y conectan esta investigación con sus implicaciones prácticas.
Deans for Impact sustenta en un informe los trece principios más relevantes de los aspectos cognitivos del aprendizaje y, para cada principio, enumera las implicaciones que tienen para la enseñanza en el aula.
Principio 1: Los estudiantes aprenden nuevas ideas en función de las ideas que ya conocen.
Principio 2: Para aprender, los estudiantes deben transferir la información de la memoria de trabajo a la memoria a largo plazo. Por ello, es necesario comprender que el aprendizaje de nuevas ideas puede quedar obstaculizado si los estudiantes se enfrentan a demasiada información a la vez.
Principio 3: El desarrollo cognitivo no progresa a través de una secuencia fija de etapas relacionadas con la edad. El dominio de los nuevos conceptos no se asimila de manera lineal.
Principio 4: La información se suele retirar de la memoria del mismo modo que se asimiló, lo que quiere que los estudiantes recuerden qué información es significativa y por qué es importante, por lo que deben pensar en el significado que tiene para ellos cuando se encuentran con el material que debe ser recordado.
Principio 5: La práctica es esencial para el aprendizaje de nuevos hechos, pero no toda la práctica es equivalente.
Principio 6: Cada materia tiene un conjunto de hechos que, si se incluyen en la memoria a largo plazo, ayudarán a la resolución de problemas mediante la liberación de recursos de memoria de trabajo, que permitirá que se relacione con contextos en los que se pueden aplicar los conocimientos y habilidades existentes. El tamaño y el contenido de este conjunto varía según el tema.
Principio 7: La retroalimentación efectiva es a menudo esencial para la adquisición de nuevos conocimientos y habilidades.
Principio 8: La transferencia de conocimientos o habilidades para un nuevo problema requiere tanto el conocimiento del contexto del problema como una profunda comprensión de la estructura subyacente del problema.
Principio 9: Entendemos nuevas ideas a través de ejemplos, pero a menudo es difícil ver los conceptos subyacentes unificadores en diferentes ejemplos.
Principio 10: Las creencias sobre la inteligencia son importantes predictores de comportamiento de los estudiantes en la escuela.
Principio 11: La automotivación (consecuencia de los valores o intereses puros) conduce a mejores resultados a largo plazo que la motivación controlada (consecuencia de recompensa / castigo o percepciones de autoestima).
Principio 12: La capacidad de controlar su propio pensamiento puede ayudar a los estudiantes a identificar lo que hacen y no lo saben, pero las personas son a menudo incapaces de juzgar con precisión su propio aprendizaje y comprensión.
Principio 13: En aquellos entornos académicos en que los estudiantes se sienten integrados y tienen un sentimiento de pertenencia, están más motivados y obtienen un mayor éxito en su aprendizaje.
En síntesis, se está produciendo una brecha creciente entre las necesidades sociales de educación y los resultados que los sistemas educativos son capaces de generar. En la actualidad, existe en una sociedad del aprendizaje que reclama un cambio profundo en las formas de aprender y enseñar. La educación se enfrenta al reto de formar para una sociedad cambiante. Una sociedad caracterizada por la incertidumbre, la inseguridad, la flexibilidad y la ambigüedad.
