Una de las habilidades más importantes que se debe aprovechar en el aula de clases y para mantener la concentración de la mente es la organización del tiempo de estudio y de enseñanza. Comenzar a hacer las asignaciones escolares sin saber cuándo se dejará el trabajo es el mejor medio para desperdigarse y alargarse innecesariamente el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Se hace necesario que los docentes y estudiantes organicen su tiempo máximo para el trabajo, y tratar de dividir ese tiempo en periodos más pequeños para que sean dedicados a otras actividades extra curriculares. No importa que, tan extenso sea el tiempo se prolongación, pero si debería ser la norma. El buen uso del tiempo de estudio requiere de tres pasos:
a) Determinar lo que se debe hacer y establecer prioridades.
b) Determinar el orden en que se hará y el tiempo que se destinará.
c) Seguir el plan con cierta flexibilidad.
Una de las estrategias que ayuda a la creatividad y a la memoria son los mapas mentales. Reflexionando sobre como el cerebro está compuesto por palabras clave, y que, además, cada sensación, recuerdo, imagen, pensamiento que accede a nuestro cerebro se puede representar con una esfera central de la cual irradian decenas, miles de enlaces. Cada eslabón representa una asociación y cada asociación tiene su propia red de vínculos y conexiones. El cerebro está compuesto de dos hemisferios. El izquierdo, en el que se localizan las funciones que tienen que ver con la lógica, lenguaje, razonamiento, números, linealidad y análisis; y el derecho, en el que se localizan las funciones relacionadas con el color, ritmo, música, imagen, imaginación, colores, sueños, entre otros.
No obstante, es importante cuestionarse ¿cuál de los hemisferios es el implicado en el aprendizaje? Ciertamente, en el aprendizaje están implicados ambos. Por tanto, las herramientas de aprendizaje que enseñemos a nuestros hijos y estudiantes permitirán que estén utilizándose simultáneamente las capacidades de cada hemisferio. Pero, ¿Cómo? La mejor herramienta es acostumbrarles a estudiar haciendo Mapas Mentales. Como hemos podido observar en diferentes medios, los mapas mentales son una herramienta útil para mejorar la capacidad de aprendizaje del cerebro. Es una expresión del pensamiento irradiante y, por tanto, es expresión de una función natural de la mente humana.
Ahora te explicaremos, como se debe realizar un mapa mental:
– El asunto/tema precisa en una imagen central.
– Los principales temas del asunto transmiten de la imagen central en forma ramificada.
– Las ramas comprenden una imagen o una palabra clave impresa sobre una línea asociada. – Cada rama principal del tema se pinta de un color diferente al resto, para diferenciarlas.
– Se pueden dibujar símbolos asociados a esa palabra clave.
En síntesis, el beneficio de los mapas mentales para un mejor aprendizaje, radica en:
– Ahorro de tiempo.
– Aumento de la concentración.
– Mejora del recuerdo y memoria.
– Se establecen asociaciones claras.
– Permite al estudiante tener una visión global del tema, natural y propio del cerebro.